Una vez me contactó una persona porque me habían recomendado para un proyecto. Al final de la reunión, después de explicarme en detalle de qué se trataba, la persona me dijo «Es que me dijeron que usted es muy bueno pero cobra muy caro», soltó una pequeña risa, nos despedimos y finalmente no trabajamos en el proyecto. Lo raro es que nunca le di un precio.
Entonces se me ocurrió escribir sobre cuánto cobro por realizar un proyecto web, y más importante, por qué cobro este precio.
Vamos directo a lo que nos interesa: El precio. Yo cobro normalmente por un sitio web Un millón y medio de pesos colombianos (COP1’500.000) o USD350, y con las capacitaciones complementarias en comercio y marketing para negocios digitales cobro hasta tres millones de pesos.
Seguramente hasta aquí, si está buscando a alguien para hacer su sitio web y le parece muy caro, no quiere seguir leyendo; pero le recomiendo que continúe, porque lo que sigue a continuación puede hacer que cambie de opinión.
1. Casi la mitad de los proyectos que hago son rediseños de sitios web, que les hicieron antes a menor precio, pero pelearon con el antiguo proveedor.
A veces siento que pude ser un buen psicólogo. Son bastantes clientes (más de lo que uno imagina) cuya introducción al proyecto es una experiencia negativa con el o los que le hicieron el sitio web actual, y que necesitan actualizarlo. Lo que me llama la atención, es que terminan en malos términos con este proveedor, así que uno de los problemas más comunes es que no tienen acceso al sitio porque esta persona no les entregó las claves de acceso.
Después de convencerlos de que «no todos somos iguales», y logro entrar al sitio para revisar en qué estado está y cómo se puede recuperar, casi siempre mi recomendación es hacerlo de nuevo (lo cual no tiene costo adicional), por una serie de razones que ahora explican por qué en el pasado pagaron menos, y por qué ahora deben pagar dos veces. No entro en detalles porque no me gusta criticar el trabajo de los demás.
2. Mi tarifa es bastante equilibrada: Una empresa cobra más del doble, y un profesional más joven cobra lo mismo o menos, pero el proyecto termina como en el punto 1.
Durante varios años estuve a cargo de equipos de producción, y mi tarea era básicamente garantizar que todos hicieran su trabajo y el proyecto se entregara a tiempo. Era claramente demostrable que todos los integrantes del equipo eran necesarios; por eso hacer un sitio web con una empresa es más caro, porque hay que pagarle a todos.
«Mi objetivo no es ser un experto sino ayudar a mis clientes a que se conviertan en expertos.»
— Santiago Cajiao
Me retiré del medio corporativo porque noté que yo sabía y podía hacer lo mismo que hacía todo un equipo, cobrando menos. Pero llevo casi 20 años produciendo sitios, con lo cual aparte de hacer lo de varias personas, se trata de hacerlo bien y eso implica tener experiencia para resolver y prever muchas situaciones técnicas que alguien que lleva menos tiempo apenas las va a enfrentar, posiblemente con el sitio web que usted le va a contratar porque cobra menos que yo.
3. Un sitio web es la herramienta, pero el conocimiento sobre la economía y el medio digital es lo que permite que esa herramienta funcione.
Hace poco, recalqué en otro artículo que la magia en Internet no existe y que el hecho de poner un sitio web al aire, no quiere decir que la gente vaya a visitarlo por arte de magia o por accidente.
Si tiene un sitio web, es posible que lo visiten y se enteren de lo que esté ofreciendo en él, pero no van a llegar solos. Existe un mundo super extenso de herramientas, métodos y mentores que por otra suma de dinero pueden hacer que su sitio web tenga el éxito que usted espera, pero para entonces habrá gastado una fortuna. En lo personal, pienso que el experto en marketing y economía digital debe ser usted, y si de pronto el tema no le llama la atención, por lo menos es importante que tenga el criterio suficiente para determinar si lo que le ofrecen es relevante para su negocio, o simplemente está financiando la carrera de un supuesto Gurú que al final va a utilizar las mismas herramientas gratuitas que usted podría usar.
Confieso que me gusta mucho dar talleres y capacitaciones, porque mi objetivo no es ser un experto sino ayudar a mis clientes a que se conviertan en expertos. Los dos talleres que di hace poco fueron muy productivos. Muy.